Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com Alstom, CAF, Siemens y Talgo presentan ofertas al concurso de alta velocidad de Renfe

Empresas:  Noticia de actualidad


La operadora adquirirá hasta treinta nuevos trenes de alta velocidad y gran capacidad

Talgo, Siemens, CAF y Alstom ha sido finalmente las compañías que han presentado oferta para el concurso de los nuevos trenes de alta velocidad cuya licitación aprobó Renfe el pasado mes de noviembre.


Alstom, CAF, Siemens y Talgo presentan ofertas al concurso de alta velocidad de Renfe
 
 
 

(19/05/2016) Finalmente, ni Bombadier ni Hitachi, que estaban precalificadas (Ver noticia), competirán por el contrato cuyo plazo de presentación de ofertas terminó el martes.

Bombardier presentó el 29 de abril una reclamación ante el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales porque considera que el contrato “no cumple los principios de no discriminación, proporcionalidad y libre competencia”, e Hitachi renunció a presentar oferta ante las pocas posibilidades de tener disponible en los plazos establecidos su modelo AT-400, adaptación para el mercado europeo de su plataforma japonesa  .

Esta licitación (Ver nº 602 de la versión impresa de Vía Libre de diciembre de 2016) prevé la compra de una flota de hasta treinta trenes de alta velocidad y de gran capacidad y de ancho estándar, y su mantenimiento durante un periodo mínimo de treinta años con opción a prolongarse otros diez años.

Por primera vez, Renfe propone un proceso de adquisición progresiva del material móvil, de modo que su incorporación a la flota se pueda ajustar a la evolución real de las necesidades  de transporte y la demanda. Así, se contratarán inicialmente quince trenes, con la posibilidad de adquirir otros quince adicionales, en lotes de cinco, dentro de los cuatro años posteriores a la adjudicación del contrato.

Montante económico

El importe máximo de licitación para los primeros quince trenes, incluido su mantenimiento durante cuarenta años, asciende a 1.401 millones de euros, mientras que para el conjunto de las opciones posibles, es decir treinta trenes y su mantenimiento durante cuarenta años, el importe total máximo sería de 2.642 millones de euros.

El proceso de licitación se plantea también de forma novedosa, como un concurso abierto con apertura pública de ofertas cuya adjudicación se producirá con el objetivo de que los vehículos puedan incorporarse a la flota  en el menor plazo posible, siempre antes de 2020. La decisión se tomará, previsibelmente, en el tercer trimestre del año 

La nueva flota

Los nuevos trenes de alta velocidad objeto de la licitación de Renfe deberán cumplir con todas las especificaciones técnicas europeas de interoperabilidad y ofrecer tener una velocidad máxima de circulación de más de 320 kilómetros por hora,

Deberán ser aptos para circular bajo catenaria de 25 kV 50 Hz c.a., 3 kV c.c. y 1,5 kV c.a. y equiparán los sistemas de señalización ERTMS y Asfa Digital. Asimismo, diez de las quine primeras unidades del contrato tendrán que incorporar el sistema de señalización de la red francesa TVM.

En cuanto a su capacidad, los nuevos trenes deberán contar con un mínimo de cuatrocientas plazas, en clases turista y preferente, con coche cafetería y posibilidad de restauración en el asiento.

Ofrecerán al viajero sistemas individuales de iluminación, climatización, conectividad y entretenimiento a bordo, y garantizarán la accesibilidad a las personas de movilidad reducida según la actual normativa.

Para su nueva flota de alta velocidad, Renfe ha fijado unos exigentes niveles de fiabilidad, disponibilidad, confort y consumo eficiente de energía. Con todo ello, la adjudicación, sobre la base de una competitiva propuesta técnica, buscará el menor coste unitario de la plaza-kilómetro durante todo el período de explotación de los trenes.

Otros criterios de valoración serán la posibilidad de disponer de rodadura desplazable en los quince trenes adicionales contemplados en la licitación y la generación de empleo directo en España que asegure el adjudicatario durante la fabricación, bien con recursos propios o subcontratados, hasta los límites que permite la normativa de la Unión Europea.

El contrato de mantenimiento incluido en la licitación se plantea, por primera vez, para la totalidad de la vida útil de los nuevos trenes, con el objetivo de garantizar que la oferta adjudicataria asegure el menor coste de explotación asociado a los trenes durante su vida útil.